ANDANZA N. 133. MI IL.LUSTRISSIM PREFERIDO

Hoy quería hablaros de una persona a la que conocí de rebote. Es un político. Es un político importante. Pero esto sería banal para mi. Lo valioso es que es una gran persona. GRANDE. El es la persona que fue a quejarse a la secretaria del Parlament porque le habían pagado de más. La secretaria se tiraba de los pelos, dios mio, en veinte años no he visto nada igual. Pues yo no  me muevo de aquí hasta que de quiten lo que no me toca. Lo más gracioso del caso es que no le habían pagado de más porque no había contabilizado unas dietas.. He tenido la suerte de compartir mesa en alguna ocasión con él, aunque poco tiempo porque una persona de estas necesitaría tener cien vidas o la capacidad de desdoblarse, pero cada detalle suyo vale por cien. Lucha por sus ideales, lo cual a veces tiene que ser duro en el mundo en que se mueve. Nunca una palabra más alta que la otra, lo del terrorismo de la palabra o los gestos dramáticos no van con él. Pero siempre está en su sitio, y eso es algo que yo admiro, por mi tendencia a veces al histrionismo o a decir las cosas igual en el momento poco oportuno. Y tiene una sensibilidad que ya quisiera más de uno/una. Es capaz de conmoverse realmente ante un niño discapacitado, ante una persona desesperada. Y es capaz de mover cielo y tierra para conseguir que ese niño, que esa persona, tengan el sitio que se merecen. Y todavía más: NUNCA dirá que lo ha conseguido él. Nunca, Poca gente hay tan grande y tan humilde como él. Pocos cargos de su envergadura cogerán un teléfono para calmar a una madre deshecha, a una persona desorientada, para seguirte los pasos sin que tu lo sepas, para ser un poco tu ángel de la guarda. Para COMprenderte. Mi reconocimiento, Il.lustríssim Senyor Santi Rodríguez Serra

P.D.: Santi, lo de I.Sr., no te lo digo en tu calidad de parlamentario, y lo sabes. Tu sabes por qué siempre tendrás este alto cargo en mi corazón