ENTREVISTA A BERNARD VELASCO. Dibujante y policía científico. Una persona con una vida intensa; a través de sus dibujos capta más allá de lo que se puede ver a primera vista de alguien. Se prejubiló como policía y se dedica a la otra pasión de su vida profesional. Diría que es el más mediterráneo de mis primos y autor de la caricatura que encabeza mi blog. Simplemente, le adoro

¿Cómo se vive en una familia con padres de diferentes nacionalidades, qué te aportó cada uno de su mundo?

Por extraño que pueda parecer, mi padre llegó a Francia muy joven (18 años) y  rápidamente olvidó que era español, pienso que estaba demasiado ocupado en  integrarse. A los 10 años, en la escuela, tuve que elegir un idioma y opté por el español. Tengo una pasión por esta lengua que me pareció fácil de aprender. Mi padre entonces empezó a contarme algunos recuerdos de su infancia y me gustaba cuando él me hablaba de su tierra. Creo que se sorprendió de que me gustara su país.

¿Qué sensación te produjo descubrir que tenías unos tíos y primos en una ciudad española cuando eras un adolescente?

Como mi padre nunca hablaba demasiado de España, me di cuenta muy tarde que tenía una familia en otro país. Me alegré de saber que eran de mi sangre y al mismo tiempo me sentí un poco triste por no haberlos podido conocer más, pero la vida sigue y el día a día te lleva a tener que centrarte en tus obligaciones.

Tus dos trabajos han sido completamente diferentes. ¿Cómo se compaginan? ¿Una es obligación y la otra pasión o las dos son vocacionales?

Es cierto que he tenido dos trabajos totalmente diferentes en mi vida, pero en realidad son dos pasiones, dos vidas emocionantes

¿Qué fue primero, el gendarme o el dibujante?

Al principio yo quería ser dibujante y me inventé un personaje de la policía. Hice las historias y los dibujos, por lo que creo que el trabajo de policía ya me gustaba mucho. Pero no era fácil ganarse la vida con el dibujo, así que opté rápidamente por la policía, a los 18 años. Era mas fácil alimentar a mi familia. Pero incluso cuando trabajaba como policía, seguía dibujando para periódicos.

¿Crees en Dios?

Lo siento, pero no. Yo no creo en Dios. Respeto todas las religiones si entienden a las restantes, y supongo que los que creen en un Dios tienen una vida más dulce, más esperanzada. Se dice que el hombre está hecho a imagen y semenjanza de él y si es realmente así me da miedo, porque el hombre es capaz de hacer mucho mal. He vivido demasiadas atrocidades.

¿Se llega a borrar todo el dolor visto? ¿O es como un dibujo que no logras recomponer nunca?

Con el dibujo los errores se borran y  los hacemos de nuevo como queremos.En la vida, simplemente no es posible y es una pena.

Tu que has vivido en varios países, ¿qué dirías que tenemos en común las personas?

Creo que en todo el mundo la gente busca la felicidad, pero sobre todo me acuerdo mucho de la gente de raza negra. Son muy agradables y se ríen con facilidad, incluso en la adversidad.Tienen un gran respeto por la vida ( la propia y la de los demás) aunque no siempre lo demuestren

¿A qué sabe el miedo? Me refiero al miedo de pensar que puedes perder la vida, ante una una situación extrema

En mi vida como oficial de policía y también como integrante de la brigada científica, muchas veces vi la muerte de cerca y a veces tenía miedo porque la sentía al lado. Pero cada vez que notaba esa sensación, era como una descarga eléctrica. Me daban ganas de superarlo para poder ver de nuevo a los que amaba.

¿Queda todavía algo de gendarme en ti o es una etapa pasada?

Sí, siempre voy a ser policía dentro de mí. He pasado 35 años siéndolo activamente, trabajando en los casos penales más importantes la mayor parte del tiempo de mi vida. No se puede olvidar así, tanto tiempo, tantas historias. Este trabajo me llevó a estar una gran parte de mi vida lejos de mi familia y todo eso no se olvida fácilmente.

¿Cómo pintarías tu vida actual?

Una vida tranquila. Pasé mucho tiempo resolviendo los problemas de la sociedad. Ahora quiero una vida más relajada. Trabajo para un periódico y me llena totalmente.

Tengo muchos recuerdos de tanta gente… pero ahora soy un dibujante feliz que hace reír a los lectores de un periódico. Tengo una nueva vida para construir, nuevos retos que ganar.